Entrevista | Álvaro Rodríguez Eiras
El presidente del grupo empresarial reconoce que el Consello Regulador de Ribeira Sacra ha contribuido a fijar población en la Galicia interior.
Reconoce la necesidad de que la empresa y la universidad colaboren en la dinamización y profesionalización del sector agrario. Y para demostrarlo el presidente de Aresa, Álvaro Rodríguez Eiras, creó un premio dotado con 10.000 euros para premiar la iniciativa y el trabajo de los profesionales que apoyan el desarrollo del ramo.-Supone ante todo un sentimiento de orgullo porque, realmente, es una agradable sorpresa comprobar el éxito que cobra cada año que pasa.
-¿Han recibido más trabajos que otros años?
-Muchos más. De todos han quedado catorce finalistas y, entre éstos ha sido difícil seleccionar el trabajo que finalmente fue premiado. De todas formas hay que precisar que uno de los objetivos principales es el contribuir a mejorar la economía rural.
-¿Cómo valora esta participación?
-Constatamos que se han presentado en esta ocasión un mayor número de trabajos, pero también de mayor calidad. Con el paso de los años cada vez tienen más participación las universidades, tanto las gallegas como las de fuera de la Comunidad. Aunque en esta ocasión podría haber tres o cuatro ganadores, tenemos establecido que sólo debe elegirse a uno.
-En la apuesta por el desarrollo del mundo rural ¿la universidad y la empresa van de la mano?
-Considero que es una relación necesaria y positiva. Lo ideal es tener conocimientos prácticos y teóricos; la empresa aporta los primeros y la empresa, los segundos. De esta forma Aresa pretende acercar la universidad a la gente del campo.
-¿Qué valoración tiene del panorama agrario gallego?
-Vivimos en un proceso de desarrollo lento pero constante, aunque este año tuvimos dos grandes retrocesos. Los incendios forestales y las riadas empobrecieron el sector agrario gallego, aunque creo que la mayoría de las políticas en marcha son acertadas.
-Y, ¿qué opina de la despoblación?
-Los jóvenes se marchan de los pueblos en el mejor momento de su vida y, por eso, hemos querido premiar a los 2.897 viticultores de la Ribeira Sacra que, además de por su buen hacer, han contribuido a fijar población en la Galicia interior.
-Y, ¿del futuro del premio Aresa?
-Mientras tenga éxito continuaremos convocando el certamen.